En artículos anteriores, he tratado el tema de la supresión de las facturas en papel en favor de las e-Facturas o facturas electrónicas y estoy convencido de que es una magnífica opción por muchos motivos, pero principalmente por el ecológico y en consecuencia me dí de alta en la facturación electrónica en todas las empresas de suministros que ofrecían esta opción, telefonia, electricidad, etc. y pasado ya algún tiempo y después de sufrir algunos inconvenientes, puedo opinar sobre este tema con cierto conocimiento y avisar de lo que en ningún momento nos informan, así:
- Las facturas electrónicas pueden estar un breve periodo de tiempo accesibles para su descarga. Hay empresas que sólo ponen a nuestra disposición las facturas de los últimos 6 meses, es decir, que estamos obligados a descargarnos puntualmente los ficheros de facturación, pues pasado el tiempo ya no estarán disponibles. En este sentido, la empresa asume que todos los ciudadanos que optan por este sistema, descargarán y guardarán los ficheros de facturación. En mi opinión, estos ficheros han de estar accesibles y disponibles para su descarga, al menos durante el periodo que la Ley marca como obligatorio para la conservación de documentos (4 años).
- La empresa puede no disponer de un portal web capaz de dar este servicio correctamente, por lo que los usuarios encontrarán multitud de dificultades para obtener los ficheros de las facturas. En los tiempos que corren, nunca pensariamos que esto puediese suceder, pero la realidad es bien distinta, el mejor ejemplo es Movistar.es, que mientras todo lo relacionado con publicidad funciona sin problemas, en el momento que accedes a tus servicios en la mayoría de las ocasiones o no están disponibles o son inaceptablemente lentos, y para muestra, en mi caso descargar las facturas de 4 meses me ha costado una semana de conectarme todos los dias, varias veces a distintas horas y desde distintos sitios y equipos para descarjarme mis facturas.
- Las facturas que nos descargamos tienen que ser ‘FACTURAS’ no pueden ser ‘NOTAS INFORMATIVAS’, pues pierden su valor como documento, y esto sucede en empresas como Telefónica que a partir de la segunda descarga inserta en el documento la marca de ‘NOTA INFORMATIVA’, y los intentos fallidos de descarga tambien cuentan, por lo que yo solo tengo ¡NOTAS INFORMATIVAS!.
- Se ha de disponer de un sistema para pedir un duplicado, sea de la fecha que sea, pero puede que no sea así si la empresa aplica el mismo periodo de seis meses para los duplicados, como el caso de Telefónica.
- Si no estamos de acuerdo con el funcionamiento de las facturas electrónicas, la empresa ha de disponer de un sistema que nos permita volver al sistema tradicional, y no como Telefónica que las dos opciones ‘Notificación e-Factura’ y ‘Desactivar e-Factura’ te conducen a la página de activación, lo que hace que sea imposible su desactivación.
Esta experiencia, me hace cambiar de opinión y recomendar que sigamos utilizando el sistema tradicional de facturas en papel, al menos, hasta que no se corrijan estas deficiencias, pues nos podemos ver en la necesidad de disponer de unos documentos y en la imposibilidad de conseguirlos.
Por todo esto pienso que algunas empresas se aprovechan de la causa medio ambiental para ahorrar costes simplemente y dejar de cumplir con la obligación que tienen de entregar una factura por los servicios que prestan y cobran.
Un saludo a tod@s.